19/11/2023 | Rey Peredo

 

Para la Federación Mexicana de Futbol (FMF) todo iba miel sobre hojuelas; la ira de la afición mexicana después del fracaso en la Copa del Mundo de Catar 2022 había sido descargada sobre el hoy ex-técnico, Diego Martín Cocca; un cambio de personajes en las altas esferas de la FMF encabezados por Juan Carlos “la bomba” Rodríguez, como nuevo presidente de la federación; la obtención de la Copa Oro bajo el mando del bien querido, Jaime Lozano; una buena actuación a secas por parte de la escuadra nacional ante Alemania, todo pintaba color de rosa, ¿qué podría salir mal?

Claramente, todo lo que prometió el presidente de la FMF fue un auténtico guion merecedor de un episodio en La Rosa de Guadalupe. La disminución de 10 a 9 jugadores en la plantilla de los equipos de la Liga MX; formación de nuevos talentos en fuerzas básicas; la creación de un consejo asesor para el director técnico en curso; la elección de un entrenador capaz de levantar a un conjunto en decadencia, absolutamente todo ha sido un maquillaje, nada ha cambiado de fondo en el futbol mexicano.



Después del importante encuentro contra la selección alemana, Jaime Lozana tenía su siguiente prueba de fuego: obtener su boleto para la Copa América 2024. El primer paso era enfrentar a Honduras en su casa en Tegucigalpa. Muchos periodistas y aficionados a la selección mexicana demeritaban a la selección catracha, perfilaban que sería un partido trabado, lleno de patadas, pero miraban al conjunto hondureño más diezmado que el azteca, qué equivocados estaban.

Un equipo sin alma, rebasado por la presión ejercida por los jugadores y afición de Honduras y, sobre todo, un director técnico sin capacidad de modificar cuando el partido se complicó, fueron los ingredientes perfectos para que la selección mexicana fuera superada de principio a fin y así, fueran superados por un marcador humillante de dos por cero.

¿Y ahora qué es lo que se viene? Bueno, no hacer otro ridículo, ahora en casa, en el Estadio Azteca este martes 21 de noviembre a las 8:30 de la noche. Con Guillermo Ochoa como ausencia importante dentro del combinado de Jaime Lozano, el equipo buscará ganar el encuentro por una diferencia de dos goles si quiere llevarlo a tiempos extra, en caso de avanzar directamente, tendrá que ganar por tres goles o más en el marcador global. Si no obtiene alguno de los resultados ya descritos, al parecer la CONCACAF deberá mostrar la “personalidad” que la selección mexicana no ha mostrado hasta ahora, situación que ya ha sucedido con anterioridad.